La danta de Baird, también conocida simplemente como danta. Es enorme, de nariz alargada como la de un elefante, amante del agua, capaz de emitir silbidos.

La Danta de Baird (Tapirus bairdii), también llamada tapir centroamericano, es el mamífero terrestre más grande de América Central, apodada el «jardinero del bosque» por su rol vital en dispersar semillas y regenerar la selva; es una especie amenazada por la pérdida de hábitat y la caza ilegal, habitando en países como México, Costa Rica y Colombia, y es un «fósil viviente» debido a su antigua línea evolutiva. 

El nombre en inglés, Baird’s tapir, honra a Spencer Fullerton Baird, un naturalista estadounidense que fue el primer curador del Instituto Smithsonian. Su apellido aparece asociado a varias especies más, como un roedor, una ballena picuda y una serpiente rata. Sin duda, dejó huella en la historia de la ciencia.

El gigante de los bosques tropicales

Las dantas son los mamíferos terrestres más grandes de Costa Rica. Miden aproximadamente 1,80 metros de largo, alcanzan cerca de 1,20 metros de altura y pueden pesar entre 180 y más de 270 kilogramos. Para cualquiera que se detenga a observarlas con atención, su tamaño resulta impresionante.

Esta sensación se acentúa especialmente cuando se les registra con cámaras trampa, ya que la mayoría de los animales que aparecen en ellas suelen ser del tamaño de un perro pequeño. Cuando de pronto irrumpe un animal comparable a un pony grande, la diferencia es imposible de ignorar.

Una nariz versátil y pies inconfundibles

Uno de los rasgos más llamativos de la danta es su hocico en forma de probóscide, una nariz flexible y alargada que utiliza para arrancar hojas, ramas y frutos. Este apéndice también le sirve como snorkel natural cuando se sumerge casi por completo en el agua, ya que es un animal que disfruta enormemente de ríos, quebradas y charcas. Además, lo usa para emitir un peculiar silbido con el que se comunica con otros individuos.

Sus patas también tienen una característica distintiva: las patas delanteras tienen cuatro dedos, mientras que las traseras tienen tres. Sin embargo, al observar huellas en el barro, es común pensar que todas tienen solo tres dedos, ya que el cuarto dedo delantero suele no marcarse en las pisadas.

Una especie adaptable, pero cada vez más acorralada

La danta de Baird es una generalista de hábitat, capaz de vivir en casi todos los ecosistemas de Costa Rica, excepto en zonas urbanas. Aunque suele asociarse con selvas húmedas, también habita bosques nubosos y bosques secos, como los de Guanacaste.

Antiguamente, su distribución abarcaba prácticamente todo el país, pero hoy en día es más común encontrarla en áreas protegidas y poco perturbadas, debido a la pérdida de hábitat y la presión humana.

Una vida dedicada a comer… mucho

Por su gran tamaño, la danta necesita invertir gran parte de su tiempo en alimentarse. Estudios han demostrado que hasta el 70 % del tiempo en que está activa lo dedica a comer, consumiendo alrededor de 13 a 14 kilogramos de alimento al día.

Su dieta varía según el entorno, pero en términos generales, aproximadamente una cuarta parte está compuesta por frutos, mientras que el resto consiste en hojas, tallos y vegetación diversa. Tras completar el proceso digestivo, los restos son expulsados en forma de bolas similares al estiércol de caballo, que suelen quedar flotando en charcos o cuerpos de agua, lo que contribuye a la dispersión de semillas.

Sensorial Sunsets