Insectos en colecciones de museos: biólogos de Costa Rica identifican nuevas especies

Un grupo de biólogos de la Universidad de Costa Rica (UCR) ha identificado 16 nuevas especies de insectos tras revisar colecciones entomológicas que permanecieron sin estudiarse durante más de tres décadas. El hallazgo incluye además nueve especies registradas por primera vez en el país, lo que eleva a 29 el número total de especies del género Scaphytopius conocidas en Costa Rica.
Investigación liderada desde la Universidad de Costa Rica
La investigación fue liderada por Carolina Godoy y Andrés Arias-Penna, quienes iniciaron el análisis en 2023. El equipo examinó ejemplares conservados en el museo de insectos de la UCR y en otras colecciones científicas ubicadas en instituciones de Estados Unidos. Según explicó Godoy, gran parte del material había estado almacenado durante años sin una identificación detallada.
Los insectos estudiados pertenecen a la familia de los saltahojas, una de las más grandes del planeta. Se alimentan de plantas y se desplazan mediante saltos, de forma similar a pequeñas cigarras. Los adultos miden menos de seis milímetros y sus estadios juveniles son aún más diminutos.
Aunque pasan desapercibidos para la mayoría de las personas, estos insectos cumplen funciones ecológicas importantes y pueden servir como indicadores de las condiciones ambientales.



Biodiversidad desde el Caribe hasta la Cordillera de Talamanca
Las nuevas especies fueron identificadas en regiones de alta riqueza biológica del país, como la Estación Biológica La Selva en Sarapiquí, los bosques húmedos del Caribe, la península de Osa y las montañas de Talamanca.
Algunos nombres científicos hacen referencia a elementos locales o rinden homenaje a científicos destacados. Scaphytopius vulcanus alude al volcán Cacao, en Guanacaste, mientras que S. hansoni honra al biólogo Paul Hanson. Otros nombres, como S. ancorus y S. viperans, evocan características particulares de su forma.
Un vacío científico que se extiende desde 1982
Antes de este estudio, publicado en la revista científica Zootaxa en septiembre de 2025, los registros del género Scaphytopius en Costa Rica no se actualizaban desde 1982, cuando se reportaban apenas cuatro especies. El nuevo trabajo llena un vacío histórico en el conocimiento del grupo y demuestra el valor científico de las colecciones de museo como fuentes activas de investigación.
Andrés Arias-Penna, curador del museo de insectos de la UCR, destacó que estos organismos pueden encontrarse incluso en entornos cotidianos.
Costa Rica, un laboratorio natural aún por descubrir
El descubrimiento refuerza el papel de Costa Rica como un epicentro de biodiversidad, donde incluso en áreas protegidas y bien estudiadas aún existen especies desconocidas. Los investigadores advierten que la diversidad real del grupo podría ser mayor y subrayan la necesidad de continuar explorando y revisando material científico existente.
Más allá de ampliar el conocimiento global sobre los insectos, el trabajo de Godoy y Arias-Penna contribuye a los esfuerzos de conservación al visibilizar grupos poco estudiados. Este hallazgo demuestra que la ciencia también avanza gracias a la revisión paciente y minuciosa del pasado, y que incluso los organismos más pequeños pueden revelar grandes historias sobre la riqueza natural del país.
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