Parques Nacionales: patrimonio natural e histórico de Costa Rica

En 1970, el pueblo costarricense tomó una decisión visionaria: proteger la riqueza natural y cultural de su territorio para que todas las generaciones futuras pudieran disfrutar de ella. Ese mismo año nació el Sistema de Parques Nacionales de Costa Rica, una iniciativa pionera que hoy es admirada en todo el mundo.
Gracias a esta política, Costa Rica mantiene una de las proporciones más altas de territorio protegido a nivel global: 10,27% de su superficie corresponde a parques nacionales, y un 17% adicional está destinado a reservas, refugios de vida silvestre y otras zonas protegidas. Esta red de conservación no solo resguarda bosques y playas, sino también sitios históricos y arqueológicos, como asentamientos precolombinos y antiguos campos de batalla, preservados con el mismo empeño que las selvas tropicales.
La importancia de este esfuerzo es enorme, ya que Costa Rica alberga cerca del 75% de la biodiversidad de toda Centroamérica, lo que la convierte en un destino único para científicos, conservacionistas y amantes de la naturaleza.
El Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC)
En 1998 se estableció el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC), que actualmente protege casi 200 áreas distribuidas por todo el país. Entre ellas se incluyen:
- Más de 50 refugios de vida silvestre.
- 32 parques nacionales de gran extensión.
- Una docena de reservas forestales.
- Varias reservas biológicas y zonas marinas.
El acceso a muchos de estos espacios es asequible y sencillo, lo que permite tanto a costarricenses como a visitantes internacionales disfrutar de una red de conservación ejemplar.



Un recorrido por los parques más emblemáticos
Costa Rica cuenta con 26 parques nacionales oficiales, administrados por el SINAC bajo el Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE). Juntos, conforman más del 25% del territorio nacional protegido. Entre los más destacados se encuentran:
- Parque Nacional Corcovado (Península de Osa): considerado una joya, alberga la mayor selva tropical de tierras bajas del mundo y una biodiversidad única.
- Parque Nacional Manuel Antonio: reconocido por Forbes en 2011 como uno de los parques más bellos del planeta, combina playas con bosque tropical.
- Parque Internacional La Amistad (Cordillera de Talamanca): compartido con Panamá, es una muestra del compromiso regional con la conservación.
- Parque Nacional Isla del Coco: declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO en 1997, es conocido como las “Galápagos de Centroamérica” y uno de los destinos de buceo, hogar de mantarrayas, tiburones martillo, tiburones ballena y delfines.
- Volcanes emblemáticos como el Arenal, Poás, Irazú, Turrialba y Rincón de la Vieja, que ofrecen paisajes y ecosistemas únicos.
- Monteverde y Santa Elena, bosques nubosos donde habita el mítico quetzal.
- Tortuguero, célebre por el desove de tortugas marinas.
- Cahuita, Gandoca-Manzanillo y Bahía Ballena, que combinan cultura local, biodiversidad marina y playas.
Un modelo de conservación y ecoturismo
Costa Rica es reconocida internacionalmente por su modelo de conservación proactivo, su administración ambiental y su apuesta por el ecoturismo sostenible. Sus parques abarcan una amplia diversidad de ecosistemas: selvas tropicales, bosques secos, manglares, humedales, reservas marinas y bosques nubosos.
Además de preservar la naturaleza, este sistema aporta beneficios científicos y educativos de gran valor, pues permite estudiar hábitats y entender mejor la importancia de protegerlos.
Los parques nacionales de Costa Rica no solo representan un patrimonio natural invaluable, sino también un compromiso social y cultural con el planeta. Son, sin duda, un ejemplo de cómo un país pequeño puede marcar una gran diferencia en la lucha por la conservación y el desarrollo sostenible.
Sensorial Sunsets
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