¿Es necesario un aeropuerto en la Zona Sur?
A principios del año pasado se estuvo hablando sobre la construcción de un aeropuerto Internacional en la Zona Sur, pero ¿es realmente necesario?
La actual administración Chaves Robles prometió la construcción de un nuevo aeropuerto internacional en la Zona Sur del país, específicamente en el sector de Osa.
Durante una gira que hizo el actual presidente Rodrigo Chaves en la Zona Sur, se hizo la promesa de construir un aeropuerto en este lugar para incentivar el desarrollo socioeconómico de la región.
Se planea hacer un aeropuerto con una pista de 2.600 metros de longitud y 45 metros de ancho, lo que permitirá la acogida de aviones de mediano alcance, es decir, de entre 180 a 200 pasajeros. Estos vendrán de Norteamérica. Contaría también con una terminal, una plataforma, una calle de rodaje y los servicios respectivos para la atención de aeronaves ejecutivas.
El aeropuerto estaría ubicado en el distrito de Sierpe, en Osa. Según Fernando Naranjo, director General de Aviación Civil, este era el lugar ideal para la construcción porque no hay dificultades con los vientos, el terreno es apto para cimentar y edificar y el espacio es el suficiente.
No solo eso, sino que la ubicación presenta buenas conexiones con las carreteras de la costa y la Interamericana y buenas conexiones con los suministros de energía eléctrica y telefonía.
Estudios
Sin embargo, para poder comenzar con la construcción de este aeropuerto, primero es necesario realizar dos estudios para determinar la viabilidad del proyecto. Estos estudios se harán en los próximos dos años y medio desde que se planteó la idea del aeropuerto.
¿Por qué? El terreno elegido se encuentra en una zona que es Patrimonio de la Humanidad, declarado por la Unesco y, cerca de aquí, se hallan los 4 asentamientos con esferas de piedra, también Patrimonio Mundial por la Unesco.
Es así como se deberán hacer dos estudios diferentes. El primero será una evaluación arqueológica intensiva de los monumentos arqueológicos y el posible impacto de las obras. De este estudio se encargarán los arqueólogos del Museo Nacional, financiados por Aviación Civil.
El segundo estudio es el de impacto patrimonial, que lo realizarán los expertos internacionales según los parámetros establecidos por la Unesco y el Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (ICOMOS).
Al tiempo que se tengan los resultados de los estudios, se podría comenzar con el proyecto.
Opiniones diversas
Construir un aeropuerto en la Zona Sur no es una idea nueva. De hecho, durante la administración Chinchilla Miranda, se firmó un decreto en el que se declaraba de interés público y de conveniencia nacional el proyecto del Aeropuerto Internacional de Osa.
Para el biólogo Jorge Arturo Lobo de la Universidad de Costa Rica, la construcción de un proyecto de esta magnitud tendría un grave impacto local sobre el Humedal Térraba-Sierpe, ya que la ubicación del proyecto se encontraría a 2-3 kilómetros de distancia del humedal.
El proyecto tendría efectos directos en el ecosistema: la construcción del aeropuerto y, luego, el tráfico aéreo y el aumento de la contaminación ambiental. Por la parte social, decenas de familias campesinas tendrían que ser desalojadas de sus fincas y perder sus propiedades. De hecho, estas mismas familias y los habitantes de la región ya han protestado contra este proyecto desde la administración de Laura Chinchilla. Esto contrasta con lo que se dice para vender la idea del aeropuerto: que será la solución a los problemas sociales y económicos de la Zona Sur.
Aeropuerto Zona Sur
No obstante, las principales consecuencias ambientales del posible aeropuerto en Osa se verán a largo plazo. El aeropuerto aumentará el ingreso de turistas, el desarrollo de inversiones y el caos inmobiliario (un ejemplo de ello es la zona de Liberia, el cantón de Osa y el cantón de Golfito) en una de las zonas con reservas de biodiversidad más importantes del país.
Algunos proyectos urbanizadores en la Fila Brunqueña han afectado negativamente las áreas más vulnerables y han causado desastres ambientales en la laguna de Sierpe, la finca Jacamar, Chontales, … Las construcciones en la Fila Costeña se realizaron sobre áreas de bosque de fuerte pendiente, lo que aumentó el riesgo de erosión y deslizamientos.
Encima, los humedales y ecosistemas marinos como el humedal Térraba-Sierpe, el Parque Nacional Marino Ballena y el arrecife rocoso de Dominical-Dominicalito fueron afectados por el aumento de carga de sedimentos por las nuevas construcciones.
A diferencia de Guanacaste, donde se pueden observar grandes proyectos hoteleros y urbanizaciones, la Zona Sur cuenta aún con una importante cobertura forestal de gran valor biológico.
Para el biólogo, el aeropuerto en la Zona Sur no es necesario, basta con la ampliación y el mejoramiento de los aeropuertos de Palmar Sur y Golfito para vuelos nacionales y el mejoramiento de la red vial de los cantones para un turismo amigable con el ambiente.
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