En las profundidades abisales del océano podemos encontrar el medio más hostil del mundo pero incluso ahí encontramos formas de vida únicas.

La Zona Abisal: Un reino de oscuridad y desafíos

Las características de la zona abisal plantean una gran dificultad para el desarrollo de la vida. Es una región carente de luz, donde la temperatura oscila entre los 0 ºC y los 3 ºC. Por lo tanto, la escasez de nutrientes dificulta la alimentación y el desarrollo de las especies que la habitan. Además, la presión hidrostática aumenta a medida que se desciende. 

A varios metros bajo el nivel del mar, donde la luz no llega, existen miles de especies que han hecho de las profundidades marinas su hábitat.

El pez víbora, el pulpo telescopio o el calamar vampiro pueden evocar imágenes de criaturas monstruosas, estas son solo algunas de las miles de especies que habitan en las profundidades marinas, según los datos recopilados por el Census of Marine Life.

 Sin embargo, a pesar de los avances en la exploración submarina, los científicos coinciden en que más del 80% del fondo oceánico aún no ha sido investigado a fondo, lo que significa que apenas hemos comenzado a desvelar los secretos de estas profundidades.

¿Existen especies gigantes en las profundidades abisales?

Se ha debatido y especulado sobre la posibilidad de especies gigantes en las profundidades abisales. Mientras que algunos sostienen que es posible que haya criaturas de gran tamaño, similares al megalodón, otros argumentan que las limitaciones del entorno hacen poco probable la existencia de especies gigantes.

En otras palabras, las condiciones extremas en las profundidades abisales, como la escasez de nutrientes y la presión hidrostática, dificultan la formación de organismos de gran tamaño. La falta de alimentos y de un metabolismo adaptado a las bajas temperaturas limitaría el crecimiento de las especies. Por otra parte, la baja disponibilidad de oxígeno y la necesidad de conservar energía en un entorno tan inhóspito podría influir en la adaptación de los organismos a tamaños más pequeños.

Entonces ¿Existen especies gigantes como el megalodón en las profundidades abisales?

La existencia de especies gigantes similares al megalodón en los interiores abisales es un tema de debate. Aunque no hay evidencia sólida, no se puede descartar por completo. Sin embargo, las condiciones extremas y las limitaciones de recursos que posee el mar a esa profundidad hacen poco probable que existan especies de gran tamaño.

La fascinante vida submarina de Costa Rica

En varios puntos de la costa del Pacífico de Costa Rica, se han hecho descubrimientos sorprendentes acerca de la vida en el abismo. Entre las especies encontradas están:

  • Chimaera, también conocido como Tiburón Fantasma: La quimera Hydrolagus trolli tiene la cabeza protuberante, con círculos negros alrededor de los ojos y un cuerpo de hasta 120 centímetros de longitud. 

  • Un ofiruideo, o estrella quebradiza: tienen el cuerpo pequeño y aplanado formado por un disco redondeado por cinco brazos articulados muy finos y largos que surgen bruscamente del disco central y pueden estar ramificados. Su nombre significa “parecido a una serpiente”, por la forma como mueven los brazos cuando se empujan sobre el sustrato.

  • Triquiúridos: conocidos como gusanos látigo, apelativo que alude a la forma del gusano que parece un látigo con un «mango» más ancho en el lado posterior final. Son los causantes de las parasitosis conocidas como tricuriasis.

  • Crinoideo dorado brillante: reciben el nombre común de lirios de mar, debido al aspecto ramificado de sus brazos. También son llamados «estrellas con plumas«. Son el grupo de equinodermos viviente que se considera más antiguo.

  • Coral Negro de al menos los metros de altura: considerado una de las especies más longevas de la Tierra, algunos de más de 4.200 años de edad.

Estos descubrimientos demuestran el interés científico de saber lo que se encuentra en las profundidades marinas de nuestro país. A su vez, tiene un solo fin: documentar estos hallazgos y comenzar a proteger esas áreas, que son fascinantes desde un punto de vista científico.

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